Unidad de Apoyo para el Aprendizaje
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En la actualidad, el estrés forma parte de la vida cotidiana y representa un desafío constante para la salud física y emocional de las personas. En este contexto, las terapias de relajación surgen como una estrategia fundamental para promover el bienestar integral al favorecer el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu. No obstante, su efectividad depende en gran medida de las condiciones del entorno en el que se aplican.
La ambientación del espacio terapéutico constituye un componente esencial, ya que influye directamente en la disposición del paciente para alcanzar un estado de relajación profunda. Características como la privacidad, intimidad, seguridad y confort, así como una iluminación adecuada, colores suaves, aromas agradables, música relajante y temperatura confortable, son elementos clave para lograr un entorno propicio.
Es así que, resulta indispensable que el personal de enfermería valore de forma integral las necesidades del paciente y el contexto en el que se implementarán estas terapias, a fin de brindar una atención centrada en la persona y coherente con los principios del cuidado integral.
Considerando lo anterior, la información que encontrarás en esta Unidad de Apoyo para el Aprendizaje (UAPA) se organiza de la siguiente manera:
Conceptualización
Características del lugar
Enfermería y la valoración para la ambientación de la relajación
Identificar la importancia de las terapias de relajación y las características del ambiente en que se aplican, con el propósito de comprender su impacto en la salud y brindar una atención integral a los pacientes que, conforme a la valoración de enfermería, las requieran.
Reflexiona
¿Qué es la ambientación para la relajación?
De acuerdo con García y Rodríguez (2009), en el actual contexto sociocultural, la vida se desarrolla en condiciones que propician el deterioro de la salud. Por ello, es fundamental reconocer al ser humano desde una perspectiva holística, entendiendo su naturaleza cósmica como una manifestación que se interrelaciona profundamente con la sociedad y el entorno natural que lo rodea.
Bajo esta perspectiva es fundamental conceptualizar al hombre desde un punto de vista holístico e integral: cuerpo, mente y espíritu.
Desde una perspectiva holística de la salud, es esencial fomentar la conciencia de que el bienestar es responsabilidad de todos. En este sentido, se promueve la adopción de estilos de vida saludables y se considera fundamental la incorporación de terapias que contribuyan al bienestar integral que ofrecen herramientas efectivas para mejorar la salud física, mental y emocional.
Es así como la ambientación para la relajación se refiere al conjunto de elementos sensoriales y espaciales diseñados para inducir un estado de calma y bienestar.
Reflexiona
¿Cómo se puede implementar en la salud?
Ambientación para la relajación en la salud
La ambientación para la relajación en el ámbito de la salud puede implementarse mediante terapias diseñadas específicamente para este fin, considerando los siguientes elementos esenciales:
• Un ambiente que garantice privacidad
• Un entorno íntimo y personalizado
• Un espacio confortable que favorezca el bienestar
• Un ambiente seguro y libre de distracciones
Para que una terapia de relajación contribuya efectivamente a la salud y al cuidado integral, deben contemplarse dos componentes fundamentales: el espacio físico en el que se lleva a cabo y la persona que solicita la intervención. Revisa en que consiste cada una:
Espinoza, Valverde y Vindas (2011) consideran que el espacio destinado para aplicar las tecnologías para el cuidado holístico con fines preventivos y de curación debe tener la finalidad de reducir los niveles de estrés generado por la rutina diaria y, con ello, lograr un equilibrio del cuerpo, la mente y el espíritu de la persona.
Para Martínez, et al., (2014) hablar de terapias de relajación lleva a considerar a la persona que las solicita como un ser humano que está atravesando por una situación de dolor físico, emocional o espiritual. Por ello, es importante realizar una buena valoración que permita destinar la terapia correcta que cubra el objetivo de disminuir el dolor o niveles altos de estrés.
¿Sabías que…?
En las últimas décadas las terapias de relajación han ganado notable fuerza y popularidad entre la población. Esto se debe a que engloban un amplio y diverso conjunto de intervenciones terapéuticas, consideradas una opción eficaz para el manejo de pacientes con dolor crónico, personas con altos niveles de estrés, adultos mayores y cualquier individuo que las requiera.
Reflexiona
Para ti, ¿qué son las conductas de riesgo?
La importancia del espacio físico radica en la planificación y organización de un entorno único y exclusivo, diseñado para favorecer la relajación. En un ambiente limpio, ordenado y cuidadosamente ambientado con música suave, la persona puede liberar su mente, cuerpo y espíritu, facilitando la mejora de su estado de ánimo y promoviendo un bienestar integral.
De acuerdo con Martínez (2019), hablar del espacio físico implica considerar la arquitectura del lugar destinado a albergar el ejercicio terapéutico. Este entorno se diseña y adapta según las necesidades específicas de las personas que acuden en busca de un lugar tranquilo, donde puedan liberar parte del estrés cotidiano y encontrar equilibrio emocional.
De acuerdo con Martínez (2019), hablar del espacio físico implica considerar la arquitectura del lugar destinado a albergar el ejercicio terapéutico. Este entorno se diseña y adapta según las necesidades específicas de las personas que acuden en busca de un lugar tranquilo, donde puedan liberar parte del estrés cotidiano y encontrar equilibrio emocional.
Para ello, el espacio físico debe poseer las siguientes características generales:
La presencia de plantas, sofás, música y una decoración con colores neutros promueve en la persona una seguridad y un confort que lo ayudan a generar un recuerdo de hogar y familiaridad que, a su vez, le produce una sensación de tranquilidad y seguridad como si estuviera en su propia casa. (Martínez, 2019)
El ambiente del espacio físico debe ser un lugar que genere paz y tranquilidad, ya que las personas pasarán varias horas ahí. Por ello, es vital la elección de colores, como el azul, el verde o neutros, como blanco, beige o gris para lograr una conexión directa e importante con el estado emocional de los pacientes. (Martínez, 2019)
El espacio físico o lugar de trabajo para la terapia de relajación debe ser un lugar exclusivo para dicha actividad. Por ello, adquieren una especial relevancia las características arquitectónicas, el mobiliario, la decoración y los recursos necesarios que se utilizarán en cada intervención terapéutica. A través de todos estos elementos se facilitará o dificultará el logro del objetivo planteado, así como la implicación de las personas en el desarrollo de las terapias. (Martínez, 2019)
Existen otras características del ambiente terapéutico capaces de generar diversas sensaciones en los pacientes. Por ejemplo: la iluminación, los colores, la temperatura, los olores, la música y la decoración. A continuación, se describe cada una de ellas:
Es un tipo de comportamiento tranquilo y apacible que da mucha importancia a la seguridad propia y que suele jugar un papel pasivo ante la mayoría de las situaciones. Las personas con este tipo de comportamiento pueden parecer tímidas, inseguras y se centran mucho más en el “cómo” que en el “qué”.
Es el comportamiento de las personas que toman a menudo la iniciativa, que saben lo que quieren y a dónde quieren ir. Asumen roles activos, a veces incluso agresivos, orientados más hacia los resultados y hacia el “qué”, que hacia el “cómo”.
Es el tipo de comportamiento enfocado en las relaciones interpersonales, por lo que los conceptos de empatía, apertura e influencia son centrales. Las personas influyentes crean enlaces con facilidad y pueden demostrar gran capacidad para el liderazgo, de modo que suelen rodearse de gente y ser muy “populares”.
Es el comportamiento perfeccionista, con enorme capacidad para contemplar los detalles, típico de personas observadoras, metódicas y analíticas que pueden ser percibidas como “frías” por los demás, ya que no suelen guiarse por su vida interna o afectiva.
El comportamiento saludable es un comportamiento que se adquiere y se aprende desde la salud. Su objetivo debe ser la salud biopsicosocial; es decir, se debe enfrentar a la salud como un proceso y no como un estado.
La salud es un proceso de adquisición sujeto a las estrategias de aprendizaje; es decir, hacer algo alguna vez, aunque sea un comportamiento que parece saludable no, se traduce en salud al instante, no es una generación espontánea.
La presencia de estos elementos o características idóneas que debe reunir el espacio físico para las terapias de relajación permite crear un clima relajado que fomente la comunicación y ayude a fortalecer el vínculo con el paciente.
La descripción del espacio físico nos lleva a reflexionar sobre lo que representa una terapia de relajación en la cual va implícito el cuidado.
¿Sabías que…?
Diseñar un espacio con características adecuadas y propicias que estimulen el desarrollo de expectativas positivas en los pacientes contribuye directamente a incrementar su motivación durante el proceso de las terapias de relajación.
Reflexiona
¿De qué manera el personal de enfermería contribuye en generar un ambiente de relajación adecuado al paciente?
Actualmente las técnicas de relajación han adquirido gran relevancia debido al valor terapéutico que se les reconoce. A través de su práctica y valoración, es posible identificar alteraciones en las necesidades del ser humano y promover su bienestar integral.
Desde la perspectiva del cuidado de enfermería, la valoración del paciente en relación con el ambiente para la relajación debe considerar que tanto las circunstancias cotidianas como las relaciones personales y laborales, inciden directamente en las necesidades individuales que permiten alcanzar el equilibrio emocional y físico deseado.
Rodríguez (2008) plantea que, en el proceso de valoración, el personal de enfermería debe considerar dos dimensiones esenciales: la Dimensión Personal-Afectiva, centrada en identificar las preferencias individuales y las motivaciones internas que propician la satisfacción emocional; y la Dimensión Práctica-Contextual, enfocada en analizar las actividades cotidianas, el entorno laboral y las rutinas específicas del paciente.
Revisa con detalle cada una de estas Dimensiones:
Profundizar en estos elementos, permite al personal de enfermería realizar una valoración integral, precisa y efectiva al identificar con mayor precisión las situaciones y estímulos que generan placer en el paciente, favoreciendo la planificación de cuidados y la implementación de terapias de relajación naturales, personalizadas y orientadas a mejorar el bienestar del paciente y, sobre todo, acordes con su estilo de vida.
A través de esta valoración integral, el personal de enfermería podrá diseñar ambientes terapéuticos que sean seguros, confortables e íntimos, favoreciendo una relajación efectiva del paciente, promoviendo su bienestar integral y contribuyendo a una mayor armonía en su vida cotidiana.
Ahora que has concluido tu estudio, reconoces la conceptualización y las características específicas con las que debe contar el espacio físico para la terapia de relajación. Es momento de poner a prueba tus conocimientos.
Ahora que has concluido tu estudio, reconoces las diferentes características de ambientación que se deben tener en un espacio específico al momento de brindar una terapia de relajación.
Además, eres capaz de reconocer al ser humano desde una perspectiva holística para entender las necesidades integrales que puede presentar y brindar la terapia que requiera de acuerdo con la valoración que se realice.
Morales, M. (2025). Ambientación para la relajación. Unidades de Apoyo para el Aprendizaje. CUAED/Facultad de Enfermería y Obstetricia-UNAM. (Vínculo)
