Otra forma es la aleatorización por bloques, que consiste en dividir el total de la muestra y hacer pequeños “sorteos” de aleatorización simple; por ejemplo, si se pretende hacer una investigación con 100 participantes —50 por grupo—, entonces, se pueden hacer cinco bloques de 20, sorteando 10 para el grupo experimental y 10 para el de control. La ventaja de esta modalidad es que, al término de cada “bloque”, siempre habrá un número igual de participantes de los dos grupos.